miércoles, marzo 28, 2007

¿Son posibles una Música y Teatro "OUTSIDERS" en Iberoamérica?


Esta semana (26-28 de marzo) tuve el gusto de asistir al Congreso internacional "Teatro y Música en España: los géneros breves en la segunda mitad del siglo XVIII", organizado por la Universidad Autónoma de Madrid(UAM), el CSIC y el Ayuntamiento de Madrid, el cual se celebró en las instalaciones de Centro Cultural Conde Duque y su Biblioteca Histórica. Congreso al cual acudieron especialistas, investigadores y estudiantes de América (Norte, Central y Sur), España, Alemania, Francia e Italia. A este respecto, adjunto una video-entrevista dedicada a la directora del congreso y especialista Dra. Begoña Lolo, a quien entrevisté el 17 de abril en la UAM, y con quien conversé sobre el congreso, su ponencia y proyectos, así como sobre este repertorio fascinante. Entrevista que esta disponible en la Revista on line OPUS MUSICA Nº 15.

El congreso incluyó una puesta del "Melólogo Inés de Castro(escena trágico-lírica), con música de Blas de Laserna y texto de Luciano Francisco Comella. Obra recuperada y editada por German Labrador (UAM), presentada por la Camerata del Prado bajo la dirección de Tomás Garrido. Laserna es uno de los compositores españoles más interesantes del siglo XVIII, y algunas de sus obras han sido editadas también por el ICCMU, pero es una lástima que no se disponga de más material para poder llevar a la escena su obra más representativa, haría falta un monográfico especializado que incluyera un colección de partituras.

Otro aspecto importante que destacar es el ámbito iberoamericano de estos repertorios, pues aun se conserva en España y América una documentación que espera ser estudiada rigurosamente. Estas obras son una fuente de especulación estética e ideológica muy interesante, debido sobre todo a su caracter de "outsider" respecto a los repertorios italiano, francés y alemán, con los que se suelen estandarizar. Cargado de peculiaridades socio-culturales y estéticas, su reconstrucción e interpretación va desde el historicismo conductista-positivista más extremo, pasando por el prisma de las teorías sobre "hibridación" (utilizando el enfoque de García Canclini), hasta lo vanguardista, lo popular y folklórico contemporáneo, enfoques que que dependiendo de las circunstancias, es decir, inmerso in situ, lo convierten en una "opera aperta", como diría Umberto Eco.


Los "monstruos", tópicos y arquetipos que coexisten en esta música son realmente fascinantes, pero por ello "periféricos" en consideración a repertorios más cerrados por la práctica y mitos contemporáneos, respecto a lo que "debe ser" o "lo que pueden ver" tanto los musicólogos, como los estudiosos del Teatro y los interpretes (mediados estos por una educación ideológica marcada por los nacionalismos y los eurocentrismos). Por esta razón, y aunque es un anglicismo, he utilizado la denominación "outsider" (cargada de connotaciones contrahegemónicas) para esta música y teatro salvajes, caricaturescos, versátiles, GROTESCOS y SUBLIMES, los cuales necesitan ser, como comentaron Dr. Joaquín Álvarez (del CSIC, también director del congreso), y ponentes como Dra. Susana Antón (Argentina), Dr. Josep Maria Sala-Valldaura (Catalunya) y Dra. Elisabeth Le Guin (UCLA): pensados como un modo, un "uso", no como un género "fosilizado"... como un metalenguaje, no como una maqueta,... y mucho menos como un "BIG MAC" cultural.

domingo, marzo 11, 2007

La obertura de La Flauta Mágica por Ingmar Bergman


Luego del Oscar Honorífico recibido por Ennio Morricone, creo que valdría la pena considerar un fenómeno interesante, el de la música como "close up", es decir, como acercamiento a un rostro, a una imagen, como subjetivación u objetivación. Como búsqueda de ese inexorable espacio que se establece entre nosotros y los otros. Pienso en los famosos temas creados por Morricone para Sergio Leone, o en ese místico solo para oboe que escribió para "La Misión", especie de relectura de J. S. Bach y de A. Dvořák, todo un discurso de imágenes creadas con sonidos, con representaciones,con realidades encarnadas por personajes y espacios, construyendo un paisaje que se introduce como si se tratase de un "zoom in" en la mente del espectador y del actor.




Pero este no es un caso particular, personalmente considero que el caso más fascinante de "zoom in" musical es la obertura de
La Flauta Mágica de W. A. Mozart propuesta por Ingmar Bergman("Trollflöjten", 1974): donde la música escrita por Mozart es concentrada por el cineasta en el rostro de una niña que forma parte del público que asiste a la representación de la ópera. Es impresionante como cada expresión de esta niña es cuidadosamente estudiada y coloreada con los rostros de otras personas del público (niños, ancianos, hombres, mujeres, y gentes de diferentes etnias), guardando un movimiento de cámara casi mínimo Bergman asume el tiempo y el espacio estructurados por la música y los convierte en melodías de timbres, de rostros cotidianos y misteriosos a la vez, como en una especie de "boyerismo" invertido de la escena al público, con lo que logra exponer un discurso silencioso a través de la música, es decir, el silencio de los rostros que a su vez "escuchan" la música de la obertura de Mozart se convierte en un "close up" al imaginario del espectador, al enigma de su interior.

En este sentido, esta especie de concepción de "close up sonoro" aplicada por Bergman, donde el rostro parece transmutarse en estructura abierta, en tema intrincado, fue cuidadosamente trabajada por su colega, el compositor sueco ERIK NORDGREN, quien trató de explorar ese paisaje insondable en la música que compuso para varias de sus colaboraciones, creo que Nordgren es también un caso muy interesante, cuya música debería ser más considerada, incluso aunque no haya recibido un Oscar.